POR UNA CABEZA...

La radio encendida en el coche daba un poco de vida a esa mañana lluviosa de noviembre. La música sonaba...
"Por una cabeza

todas las locuras

su boca que besa

borra la tristeza,

calma la amargura..."

un recuerdo, un sueño y una sonrisa vinieron a mí.

El recuerdo de hace cinco años, la primera vez que oí ese tango en la obra de teatro. Sobre el escenario Nikky,Irene tú y yo dispuestas a luchar contra el mal junto al pequeño Momotaro.

El sueño era el de viajar este país de los gauchos y del mate, el país que tú nos diste a conocer y apreciar. ¡Ay querida Kela! como me habría gustado haberte tenido allí y contarte miles de cosas. Ha pasado tanto tiempo...Ya no se si nuestra amistad se debió a que las circunstancias nos hicieron entendernos o si seríamos tan amigas como lo fuimos si viviésemos en la misma ciudad.
Cuántas veces habíamos soñado con volver a juntarnos...y de pronto, me ví subida en un avión de aerolineas argentinas camino a Jujuy.¡Y nada menos que para tu boda!

¿Qué son 24 horas de viaje? Al fin y al cabo nada. Pues en un día he tenido más sensaciones que en mis dos últimos años.Ya no es sólo ese acento meloso que hace que me enamore con simplemente oirles llamarme de vos. Es el mantener ciertas costumbres que en mi vida estaban olvidadas. El rito de la Flechada o el agradecimiento a la pachama me recuerdan que hay tradiciones comunes en todas las culturas. Es ese sabor dulzón del ponche de leche y el olor del asado que ha impregnado mi ropas...Son tantas y más cosas que me quedan por descubrir...